Ayer se publicó en el Boletín Oficial del Estado, el Real Decreto 1021/2015, que establece para las instituciones financieras la obligación de identificar la residencia fiscal de los titulares de determinadas cuentas financieras y de informar acerca de las mismas en el ámbito de la asistencia mutua.
Con esta nueva norma, la Agencia Tributaria podrá acceder de manera automática a información sobre aquellas personas o entidades que controlan cuentas financieras abiertas en entidades españolas y de otros estados, así como los valores de negocios o fondos de inversión que cualquier persona que resida en el territorio español tenga en Luxemburgo, Austria o Irlanda.
La citada normativa entrara en vigor el próximo 1 de enero de 2.016.